MIRA EL VIDEO CON LA FELICITACIÓN DE NAVIDAD [https://youtu.be/F3ob9pEOo0Q]
Me alegra poder desearos también este año: ¡Feliz Navidad!
Una felicitación que no nos impide ver la realidad en la que vivimos con una mirada sincera. Las guerras en Ucrania, en Gaza, en Sud Sudan, los cristianos asesinados en Nigeria nos recuerdan lo frágil que es la paz y lo valioso y de ninguna manera obvio que es el don de la serenidad en la vida de nuestras familias.
Papa León nos ha recordado que la paz es un don grande, que tenemos que cultivar con paciencia y el corazón abierto. No es necesario hacer cosas extraordinarias: es suficiente elegir cada día vivir con respeto y amabilidad, acoger a quien es diferente, tender la mano a quien lo necesita.
Jesús que nace en la sencillez del pesebre nos invita a cultivar precisamente estos gestos cotidianos para reavivar la esperanza en nuestras vidas.
La suya es una invitación a no encerrarnos en nuestros miedos, sino a construir puentes de diálogo y solidaridad, empezando por las pequeñas cosas que nos pertenecen: nuestra familia, nuestros amigos, nuestra comunidad.
Por tanto mi deseo para esta Navidad es que tú puedas ofrecer calor y consuelo a quienes están solos, ponerte al lado de quien sufre para hacerle una caricia, donar una mirada, un gesto de atención, momentos de escucha y diálogo.
Celebrar la santa Navidad sirve precisamente para que cada uno de nosotros pueda convertirse en portador de ese mensaje eterno de amor que supera todas las barreras y creer que incluso un pequeño gesto de generosidad puede cambiar el mundo.
Desde la Basílica de san Antonio, en nombre de los frailes, un gran abrazo y una oración para cada uno de vosotros.
¡Feliz Navidad y feliz año nuevo de parte de los frailes de la Basílica y del «Messaggero di sant’Antonio»!
p. Giancarlo Zamengo, director generale del «Messaggero di sant’Antonio»